Ya se que este tipo de galletas tan repipis las tenéis muy vistas, pero son las que me salen del alma, ¡qué le vamos a hacer!

Mi imaginación me lleva siempre por los mismos caminos. Cuando pienso en galletas para decorar, sin quererlo vienen a mi mente imágenes de lazos, puntillas, colores pastel… Pero es verdad, tengo que animarme más a hacer otro tipo de galletas, como las de viaje, porque aunque me da pereza pensarlas y hacerlas,y siempre pienso que no me van a quedar tan bonitas, al final me quedo muy contenta con el resultado. Y sobre todo, satisfecha de hacer algo diferente.

Que también es verdad que hacer siempre lo mismo aburre.

Pero mientras me animo a hacer alguna temática distintas, seguiré disfrutando de galletas como estas. ^_^

Me encantan mis nuevos moldes de zapato y pintalabios.
Por cierto, aunque en las fotos es difícil apreciar los tamaños, el molde de pintalabios es extrapequeño. Fue un poco decepcionante verlo en persona cuando me llegó.

El paraguas, aunque lo tengo desde hace meses, era la primera vez que le daba uso. Una pena. Ya os he hablado muchas veces de lo importante que es hacer buenas compras en materiales como estos, que por cierto, no son nada baratos.

El vestido y el bote de colonia, no los busquéis por las tiendas, son de cosecha propia, es decir, de cartulina. Así que si los queréis, ya sabéis que tenéis que hacer: buscarlos por vuestra casa porque están ahí, escondidos entre las cartulinas, el lápiz y las tijeras jeje.

Y por último, si quieres saber cómohacer la chica del camafeo, pásate por las galletas de María Antonieta.

^_^