Hacía muchísimo tiempo que tenía ganas de hacer galletas de nata. Una vez las probé cuando una compañera de trabajo las hizo por su cumpleaños y me gustaron tantísimo que se me quedaron grabadas en la memoria. Al final me he animado, y aunque ha quedado una receta bastante diferente, he descubierto unas nuevas y deliciosas galletas que apunto entre mis favoritas.

La nata es uno de los ingredientes que nunca faltan en mi cocina, como el chocolate, la mantequilla, el azúcar o la harina. Mi nevera y despensa están llenas de estos ingredientes por si acaso.
La nata es más importante de lo que piensas, ya que la puedes usar en infinidad de postres. Me encantan los bizcochos que la llevan, es fundamental en la elaboración de tartas de queso, la nata montada es un acompañamiento perfecto, así que unas galletas cuyo ingredientes protagonista era la nata, iban a gustarme sí o sí.
Una vez más te lo recuerdo, usa nata de alta calidad: buen sabor, buena textura y alto porcentaje de materia grasa como la que tiene Central Lechera Asturiana.

Ingredientes

• 1 huevo L
• 75 g de mantequilla sin sal
• 200 ml de nata 35% materia grasa Central Lechera Asturiana
• 200 g de azúcar
• 300 g de harina
• 1 cucharadita de levadura
• 1 cucharadita de vainilla

Preparación

1. Bate la mantequilla reblandecida a temperatura ambiente junto con el azúcar, hasta que quede una mezcla esponjosa y la mantequilla quede más blanquecina.

2. A continuación añade el huevo a la masa, asegurándote que se mezcle bien con la mantequilla. Es momento también de poner la vainilla.

3. Es momento ya de añadir la nata líquida.

4. Mezcla en un bol aparte la harina y la levadura e incorpóralas a la masa.

5.  Con nuestra masa lista llega el momento de hacer nuestras galletas de nata. Forra una bandeja de horno con papel de horno y ve precalentándolo a 180º.
Con las manos, o con la ayuda de una cuchara, vamos a ir haciendo bolitas pequeñas. Pon esas bolitas en la bandeja del horno y aplástalas con la mano o con la cuchara. Mis galletas tenían un tamaño aproximado de 3 centímetros. Deja una separación entre galleta y galleta pues esta receta lleva levadura y crecerán durante el horneado.

6. Una vez el horno alcance la temperatura mete las galletas por tandas dejando que se horneen durante 8 o 10 minutos aproximadamente. Pasado el tiempo de horneado deja que se enfríen por completo sobre una rejilla para que no se reblandezcan.

Trucos y consejos

• Como las galletas son muy blanquitas, es muy fácil saber si están hechas o no. No es como las galletas de chocolate que cuesta saber si se están quemando.
  Advertirte que no quedan unas galletas crujientes. Lo mejor es comerlas recién hechas y guardarlas en un recipiente hermético para que se conserven lo mejor posible y no se reblandezcan demasiado. Pero son tan pequeñitas, ligeras, suaves y deliciosas que te durarán poco.

Anda! Coge una que sé que tienes ganas jaja.
No te sientas mal por la dieta, que ya sé que algunos estáis en plena operación bikini. Son tan pequeñitas que no te harán sentir culpable.

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Me declaro fan absoluta de Instagram, donde subo fotografías de mi día a día y donde he descubierto páginas geniales y gente maravillosa.
Pero la red social que me tiene más enganchada con diferencia es Pinterest, donde puedes hacer carpetas temáticas con todas las fotografías que te gustan. Es una fuente de inspiración infinita, tanto en repostería, moda, decoración y qué decir para mi trabajo. De aquí saco la gran mayoría de ideas tanto para mis dulces como para mis clases. Si eres maestra como yo te la recomiendo al 100%, o también si eres madre y te gusta hacer manualidades con los pequeños de la casa.

Así que ya sabéis, os espero a todos, tanto por aquí como por mis redes sociales ;)
BESOS

Mirta